Ecología

El paisaje también se contamina

La especie humana avanza, progresa, aplica cada vez técnicas más complejas y osadas. Pero ¿es avance eso de contaminar irracionalmente el aire, las aguas y la tierra? ¿Es avance eso de encerrarse en inmensas jaulas de cemento vulneradas por el hollín? ¡Cuidado ya! Nuestro progreso exponencial puede volverse contra nosotros mismos. Dr. Huberto Cuevas Acevedo

 

El Sistema de Tandilia es uno de los sistemas serranos más antiguos de nuestro país, experimentó muchos cambios hasta llegar a ser lo que observamos hoy en día. En este crisol de especies vegetales y animales únicas y ciudades que conviven con ellas desarrollaron un escenario singular para los amantes de la naturaleza: los pastizales serranos.

Se conoce como pastizal, a aquella porción de área, región o hábitat que se encuentra principalmente dominado por especies vegetales herbáceas, mayormente pertenecientes al grupo de las gramíneas (mejor conocida como pastos). Los pastizales pueden ser de origen natural o ser producto de la intervención humana, como el caso de las pastura para la ganadería.

Los pastizales ocupaban la cuarta parte de la tierra y hoy con excepción de la Antártida, se encuentran representados en todos los continentes. De acuerdo con sus características particulares existen diferentes tipos de pastizales: estepas, praderas, mallines, sabanas, pampas, entre otros.

El pastizal serrano es un ecosistema único que se desarrolló dentro de la región pampeana. La características del relieve serrano actuaron a modo de isla, facilitando el origen de especies propias y permitiendo que a los habitantes pampeanos se sumen visitantes de otra regiones. Esta situación hace que los pastizales serranos sean las áreas de mayor biodiversidad de la región pampeana.

¿Por qué necesitamos el pastizal serrano?

El correcto funcionamiento de los ecosistemas produce servicios ambientales, que son los beneficios que la sociedad obtiene a partir de los procesos y funciones de los ecosistemas. Es la biodiversidad de los pastizales serranos la que genera oxígeno y agua limpia, crea tierra vegetal en la roca, ayuda a regular el clima, controla la erosión, poliniza nuestros cultivos y recicla nuestros desechos. Además actúan como barreras frente a las plagas de los cultivos, controlan vectores de enfermedades y funcionan como refugios para especies benéficas. Incluso ahora con el cambio climático, es la biodiversidad quien, si le damos la oportunidad, ayudará a reducir el impacto del efecto invernadero. Más allá de los ingresos económicos que el pastizal genera, éste posee otros valores intrínsecos de tipo ecológico, ético, cultural, científico, recreativo y estético. Debido a su extensión y al buen estado de conservación que presentan los pastizales serranos del sistema de Tandilia, están consideradas “Áreas Valiosas de Pastizal para Sudamérica”.

¿Cuánto vale el canto de las aves? ¿Y los pensamientos que tenemos cuando cae la tarde sobre un cerro? ¿Y maravillarnos con el vuelo de un águila? Entonces, ¿Cuál es el valor de la biodiversidad?

¿Por qué estamos perdiendo nuestros pastizales?

La expansión de la agricultura en la pampa causó profundos cambios en el pastizal a escala local, regional y de paisaje. Esta actividad incrementó la presión sobre los pastizales serranos, forzando la relocalización del ganado hacia áreas menos aptas para cultivar. Esto provocó un aumento de la carga animal, que llevo al deterioro del pastizal por sobrepastoreo. Además, parte de los pastizales serranos fueron convertidos en bosques implantados, con severos cambios en la estructura y función del paisaje. En la actualidad la intensificación agrícola está asociada a amenazas adicionales que incluyen el uso indebido de agroquímicos, la quema frecuente y el reemplazo por especies exóticas, algunas de las cuales se convierten en invasoras.

¿Por qué estamos perdiendo nuestros pastizales?

Existen otras amenazas que por su extensión a menudo son desestimadas pero revisten de enorme importancia por su impacto local. Este es el caso de las canteras y la expansión urbana sobre los pastizales serranos. Las canteras junto a la expansión de las ciudades sobre las sierras, son amenazas de alto impacto. No solo remueven el ecosistema de pastizal, sino que modifican el paisaje de manera irreversible. Es decir, allí donde se dan estas amenazas, no será posible restaurar el ambiente original. Además, tienen serias consecuencias económicas en la actividad turística, reduciendo el atractivo del paisaje y aumentando los niveles de contaminación.

¿Qué podemos hacer?

Sin dudas la mejor opción para conservar es la creación y el manejo de áreas protegidas. Este tipo de iniciativas no han alcanzado una magnitud relevante y la superficie actual de áreas protegidas en el Sistema de Tandilia es todavía muy baja. Como la mayor parte de los pastizales serranos están en manos privadas, es muy importante conocer de qué manera podemos contribuir a la conservación de estos ambientes. Es importante por lo tanto desarrollar una mirada integral que destaque la naturaleza multifuncional de todo el paisaje.

Buenas prácticas ganaderas

Conocer los tipos de pastizal y sus especies vegetales más comunes es uno de los primeros pasos para protegerlos. Saber que el estado en que se encuentra el pastizal depende de su manejo previo, trae sus beneficios. Así será posible entender al pastizal y seleccionar las técnicas a utilizar para su mejora como la adecuación de la cantidad de animales por potrero; efectuar descansos de potreros con pastizal natural; complementar con pasturas cultivadas perennes, e implementar un sistema de pastoreo que permita programar y controlar el efecto del ganado sobre la condición de los pastizales.

Mantener corredores

Los angostos espacios que conservan algo de la vegetación nativa original cobran enorme relevancia por su función ecológica. Ellos son bordes de arroyos, vías férreas, rutas y caminos e incluso bordes debajo de alambrados. En estos espacios parte de la vegetación original pudo recuperarse y sus semillas guardadas largo tiempo generaron un ver – dadero banco de biodiversidad. Estos espacios conservan pastizales, de gran importancia como hábitat y refugio para la fauna nativa; y actúan como corredores conectando los fragmentos remanentes dispersos en la ex – tensa matriz productiva. Los arroyos y los corredores naturales que están en sus orillas proporcionan además otros ser – vicios ambientales importantes. Los corredores de los arroyos constituyen redes vitales para la vida silvestre y ayudan a filtrar sustancias contaminantes. Los arroyos que están rodeados de una mezcla saludable de vegetación amortiguan los efectos de los usos del suelo circundante que de otro modo podrían perjudicar la calidad del agua. Dentro de esta zona de exclusión es importante mantener la vegetación autóctona, evitar las actividades que afecten los hábitats e impedir la eliminación de sustancias perjudiciales.

La integración de la conservación de la biodiversidad con las actividades ganaderas necesita ser un elemento central en el esquema de conservación de las Pampas.

 

Fuente: Kacoliris, F.P.; Berkunsky,I.; Velasco, M.A.&Cortelezzi, A. 2013.
Pastizales serranos en el sistema de Tandilia, Neotropical Grasslands Conservancy, Tandil, 32 pp.