Estación biológica

La estación biológica cuenta con un centro de interpretación que posee una pantalla como ayuda audiovisual para los visitantes, en la que se expone material relacionado con la reserva. Además cuenta con un serpentario de reptiles de la zona, grandes arácnidos, un pequeño batracio (sapito mari mari) y peces destinados a la alimentación de determinados reptiles.

Se exponen fotos de vegetales y animales correspondientes a un trabajo realizado en la reserva, todos disponibles para su adquisición por parte de los visitantes interesados. Colindando con este centro se encuentra el laboratorio de ofidios (yararás). Manteniéndose en un ambiente climatizado cuarenta ejemplares, a los que se les extrae veneno, necesario para una investigación en marcha destinada a desarrollar un nuevo método para la producción de suero antiofídico, que simplificaría al actualmente en uso. Participó en dicho proyecto el méd. vet. Carlos Begue, profesional especializado en distintos centros del país, con nuestro apoyo financiero.

Aprovechando una boca de cantera abandonada (3/4 de ha) se exhiben y procrean pumas. Llamas en otro potrero con aguada natural (3 ½ ha), y carpinchos en otro entorno acuático. Poseemos un jaulón grande, de 150 m2, para las aves, en el que se exhiben y reproducen pavos reales, cotorras, loros barranqueros y palomas torcazas. Poseen una malla de alambrado que facilita el reconocimiento por parte del público (mediante carteles con fotos identificatorias). Permite la libre entrada y salida de aves pequeñas (muchas veces en bandadas) para alimentarse. Un gavilán mixto, herido, incorporado para atención veterinaria, gatos monteses y faisanes.

Cabe destacar que en esta estación se recrían pollitos machos provenientes de establecimientos dedicados a la incubación de líneas de gallinas de alta postura, en los cuales estos se descartan, siendo imprescindibles para la alimentación de yararás y estratégicos para carnívoros y aves de presa.

Además, en la estación biológica se encuentran implantados 65 ejemplares forestales de flora nativa, característicos de distintas zonas del país, y se incorporan nuevos ejemplares cada año, que son ambientados previamente en nuestro pequeño vivero.